La Corte Suprema comunitaria de la Unión Europea rechaza una petición ciudadana en contra de “la Versión Europea de la Política de la Ciudad de México”.
NUEVA YORK, 27 de abril (C-Fam) “Uno de Nosotros”, un movimiento internacional pro-vida, apoyado en Europa por cerca de dos millones de ciudadanos de ese continente, presentó ante la Corte de Justicia de la Unión Europea un alegato en favor de la vida, precisamente en contra de sus políticas anti-vida, vigentes, mas este tribunal comunitario europeo descartó el pedido.
La petición fue presentada por esta voz ciudadana “Uno de Nosotros”, al completarse ahora seis años de lucha por la persona humana.
Este veredicto constituye una victoria institucional, para “Uno de Nosotros”, en el campo jurídico, aunque podría ser un paso atrás en el campo ético dentro de esta causa jurídica, escribió Grégor Puppinck, Director del Centro Europeo para la Ley y la Justicia, al momento de conocerse el lunes recién pasado el dictamen jurídico de la Corte Europea”.
Mientras que por un lado, expresó, y en cuanto a los procedimientos judiciales, y al nivel doctrinal y teórico , y el legal, la campaña por la vida, obtuvo una victoria para la causa, sin embargo, en el nivel de los llamados “méritos jurídicos” estimados por la Corte, se perdió allí la oportunidad política de que el Parlamento Europeo entrara a conocer una prohibición de las investigaciones que se hacen en los embriones, y que resultan en su destrucción.
Y no solamente eso, sino que tampoco se avanzó en cuanto a que la Unión Europea deje de imponer como condición, para otorgar la ayuda internacional, la obligación de adoptar políticas en favor del aborto.
Esta última práctica de la Comunidad Europea, la de condicionar la ayuda con el aborto, ya es ampliamente conocida como “La Versión Europea de la Política de la Ciudad de México”.
Puppinck, quien previamente encabezó esta campaña pro-vida en el 2012, junto a otros líderes europeos pro-.vida, había logrado seguir los avances del litigio por esta petición ante la Corte Europea a lo largo de todas sus fases.
Durante una entrevista concedida por Puppinck a C-Fam, él no pareció contrariado a pesar del revés: “Podría haber sido peor”, manifestó este líder europeo pro-vida.
Su argumento es éste: “El Tribunal Europeo podría haber estimado que ( en este caso) el órgano ejecutivo de la Comunidad Europea, es decir la Comisión Europea, mantuviera un “cheque en blanco”. Por el contrario, en el aspecto legal, esta resolución de hoy recorta el monopolio legislativo entregado a la iniciativa de los burócratas de la Unión Europea desde el origen de la Unión misma”. “Y es un pequeño paso en el avance hacia lograr que la misma Comisión sea sujetada al escrutinio jurídico”.
Previamente , durante un anterior episodio, el movimiento “Uno de Nosotros” ya había demandado a la Corte Suprema de la Unión Europea, después de que la misma corte había descartado, de manera sumaria, una petición para que la legislación de la Unión Europea prohibiera las prácticas de investigación destructiva de los embriones, así como la de condicionar la entrega de sus recursos de ayuda internacional a la imposición de la política en favor del aborto.
Esta campaña inicial ya había tomado por sorpresa, y ya había causado frustración, a la persistencia de la burocracia europea, en sus intentos de suprimir y contrarrestar la campaña pro vida.
Esa vez el argumento jurídico en esa oportunidad ha sido este: De acuerdo con la Legislación Comunitaria Europea, al momento de recibir esa primera petición de parte de “Uno de Nosotros”, la Comisión ejecutiva europea debería haber trasladado la petición al Parlamento Europeo. Sin embargo la Comisión simplemente adoptó el camino administrativo de obviar la admisión de la petición. Lo cual significó que entonces se adoptó una resolución que pasó por encima del escrutinio de la alta corte europea. A pesar de que la petición iba respaldada por la firma de más de dos millones de ciudadanos activos en la Unión Europea.
Ante esta decisión de la Comisión Europea el movimiento “Uno de Nosotros” apeló al Tratado de Lisboa, que por sus provisiones de cara a las iniciativas de los ciudadanos de la Unión Europea, establece los procedimiento para las iniciativas de los ciudadanos europeos. Los procedimientos no fueron cumplidos. Con ello se impide el ejercicio de una de las pocas funciones democráticas de la Unión Europea. Si no la casi única, estimó “Uno de Nosotros en aquella primera oportunidad.
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